El tiempo en que se produce el encuentro

La pregunta

¿Por qué hay algo y no más bien nada? Es una de las preguntas más subversivas que se haya hecho el ser humano. La filosofía, que reflexiona sobre la esencia de nuestra existencia, opera más sobre la pregunta que sobre las respuestas posibles.

Según Sartre, la existencia precede a la esencia y se constituye en el momento en el que a una persona se le permite vivir. Al no tener un punto de partida fijo, el ser humano no tiene nada que le dé esencia. Es lo que hace —a partir de ese punto fijo— lo que define su existencia, por ende, su esencia.

Es por eso que Sócrates elige la muerte por sobre el exilio, porque Sócrates era Sócrates en Atenas.

 

La respuesta

Toda hipótesis científica sobre la realidad que aceptamos comienza con idealizaciones sobre las que se elaboran conceptos que permitirán construir distintos modelos de esa realidad.

La física, por ejemplo, intentará calcular el tiempo en que se produce el encuentro entre dos personas que caminan en sentidos contrarios desde dos puntos fijos determinados.

En el afán de demostrar su hipótesis, el científico tomará como variable esa “separación inicial” de la que cada una de ellas parte. Esa separación es, a su vez, pura posibilidad de encuentro.

 

El tiempo como materialidad

Tras la muerte de Jean Paul Sartre, Simone de Beauvoir publica un libro titulado La ceremonia del adiós. En él registra alguna de las conversaciones que mantuvo con quien fue su compañero de toda la vida y da cuenta del tiempo que compartió con él. Su muerte nos separa. Mi muerte no nos unirá jamás, se despide.

 

El encuentro como método

Todo lo que sabemos sobre Sócrates no surge de su propia escritura. El modo en el que hacía filosofía tenía como estructura de base la relación con sus interlocutores y el encuentro con sus discípulos. Hacía del diálogo con ellos su propio método de enseñanza. Sin esos encuentros poco sabríamos de su pensamiento o de su propia paradoja existencial: sabemos que no sabemos nada

 

¿Qué sabemos sobre el proyecto PAC?

No se trata sólo de un espacio de encuentro, formación y producción de arte. Se trata de un espacio que permite a cada artista compartir una experiencia personal que deviene hecho colectivo. Todo hecho educativo en torno a las prácticas artísticas contemporáneas que se sitúe en nuestro tiempo, no sólo pone en cuestión lo que para cada artista sostiene su práctica sino que también indaga sobre la propia práctica docente como actividad artística.

 

Sobre la exposición

Esta muestra reúne las obras de siete artistas que no tienen más en común que el tiempo que han compartido en un programa de formación artística. Y es precisamente ese tiempo el que da cuenta de una experiencia colectiva que precede y excede a esta exposición.

Una experiencia que quizás sea el lugar más generoso en el que se pueda pensar la propia producción: una muestra colectiva con artistas que se relacionan desde hace un año intercambiando ideas acerca de sus producciones con colegas, curadores y profesores, e interviniendo la obra de otros mientras obtienen cierta porosidad que les permita dejar intervenir la propia.

 

Esta muestra da cuenta del tiempo en que se produce el encuentro entre artistas que convergieron en un espacio físico y temporal, desde siete puntos fijos determinados.


Pablo Silvestri
Rosario, 2019

Para exposición "El tiempo en el que se produce el encuentro"